viernes, 11 de diciembre de 2009

LA NAVIDAD Y LA SALUD


Las vacaciones navideñas no son tan entrañables como las pintan. Al menos para nuestra salud. Científicos de la Universidad de Pitssburgh y la Universidad Wunnipiac han demostrado que nuestros hábitos alimenticios cambian sustancialmente durante los fines de semana y las vacaciones. Tras analizar el comportamiento de los consumidores durante dos años seguidos, Jeffrey Inman y sus colegas han demostrado que en esos días no sólo aumenta el consumo de calorías sino que también se reduce el valor nutricional de los alimentos consumidos. En otras palabras, la pirámide alimenticia se trastoca totalmente. Los científicos aseguran que esto les sucede incluso a personas que llevan una dieta estricta, y en la revista Journal of Public Policy & Marketing advierten que es imposible combatir la “epidemia” de obesidad sin tenerlo en cuenta. Por eso han recomendado al Departamento de Agricultura Estadounidense que, en sus próximas campañas para una alimentación sana, incluya pautas específicas para sábados, domingos y festivos.

Por otra parte, según un estudio que publica este mes la revista Journal of Leukocyte Biology, el estrés que supone el reencuentro familiar agrava las enfermedades autoinumnes y hace que infecciones latentes emerjan durante estas fiestas. “Es necesario que nos concentremos en entender cómo dos sistemas diferentes, el inmune y el nervioso, interactúan de esta manera”, concluyen sus autores.

FUENTE:UNIVERSIDAD DE PITSSBURGH

TESTOSTERONA Y AGRESIVIDAD


Un estudio suizo desmiente la creencia popular de que la testosterona, hormona masculina por excelencia, genera agresividad y egocentrismo en los hombres.

Según un estudio de la Universidad de Zúrich en Suiza publicado por la revista Nature, la testosterona "induce al comportamiento antisocial en los seres humanos, pero más a causa de nuestros propios prejuicios sobre sus efectos que a causa de un actividad biológica real". De hecho, según señala el equipo dirigido por el profesor Ernst Fehr, "el efecto es más bien el contrario: la testosterona incrementa la capacidad de discernir con equidad y con justicia".

Para llegar a esta conclusión, los investigadores dividieron a 120 sujetos en dos grupos: a uno se le suministraba una dosis de testosterona de 0,5 miligramos y al resto un placebo. Al someterlos a un experimento de comportamiento en el que debían negociar con ciertas sumas de dinero, observaron que aquellas que recibieron testosterona se comportaban generalmente de manera más equilibrada, tenían menos conflictos y se desenvolvían mejor en un ambiente social. Sin embargo, los sujetos que pensaban que se habían incrementado los niveles de testosterona en su organismo aunque no fuera cierto, mostraron un comportamiento más conflictivo que aquellos que creían que habían ingerido el placebo. “No es la testosternona la que induce agresividad, sino el mito -la connotación negativa y antisocial- que rodea a esta hormona”, concluyen los investigadores.

FUENTE: UNIVERSIDAD SE ZURICH

¿SE SOBRESTIMA LA INFLUENZA AH1N1?


La gravedad de la epidemia de gripe A se ha sobrestimado y su impacto en la población estadounidense este invierno no será más grave que el de una gripe estacional común, según un estudio publicado por la Universidad de Harvard. El nuevo virus descubierto este año sí presenta, sin embargo, una amenaza especialmente grave para poblaciones menos vulnerables a la variante estacional, como los niños menores de 5 años y los adultos de 18 a 64 años de edad.

El estudio, publicado en la edición digital de la revista médica PLoS, da la razón a las recientes estimaciones del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC) de que el virus ya ha pasado su fase más grave de contagio y su actividad es ahora mucho menor. "Las buenas noticias del estudio son que la gravedad de la gripe A puede ser menor de lo que temíamos", expresó en un comunicado Marc Lipstich, autor del estudio y profesor de epidemiología en Harvard.

"Hasta ahora, ha sido muy difícil medir el impacto de la gripe, y lo crucial era prepararse para las diferentes consecuencias posibles. En cambio, ahora el virus parece ser mucho más suave, y podemos dedicarnos a analizarlo", explicó Lipstich.

El estudio, que comprende el periodo entre abril y julio de este año, también ofrece estimaciones que pretenden servir de ayuda a la hora de predecir la gravedad de una posible nueva ola de contagios durante este invierno. Teniendo en cuenta que el virus no está afectando a más del 25 por ciento de la población en ningún país del mundo, el peor escenario que presenta el estudio es el que causaría unas 20 ó 25 muertes por cada 100.000 habitantes.

FUENTE: UNIVERSIDAD DE HARVARD

LAS MUJERES VIVEN MÁS


Tanto en humanos como en otros mamíferos, la esperanza de vida de las hembras suele superar a la de los machos. ¿Pero por qué? Según una nueva investigación del profesor Tomokhiro Kono, de la Universidad de Tokio, la culpa podría tenerla el esperma del padre.

En una investigación publicada hoy en la revista Human Reproduction, Tomohiro Kono relata cómo los 13 ratones creados en su laboratorio a partir de dos ovocitos femeninos, y por lo tanto con la carga genética de dos madres (ratones bimaternos), viven alrededor de 186 días más que los ratones de control nacidos de la unión normal de óvulo y espermatozoide. La medida de esperanza de vida de estos roedores es de 600 a 700 días, lo que implica que los libres de esperma viven un 30% más. Por si fuera poco, estos animales tienen un sistema inmune más activo que sus congéneres con padre y madre. Kono sospecha que las razones para esta diferencia en la longevidad podrían estar relacionadas con un gen (Rasgrf1) del cromosoma 9 asociado al crecimiento postnatal, y que normalmente se hereda por vía paterna.

Esta es la primera vez que se demuestra un fenómeno así en mamíferos, y los autores del estudio creen que podría explicar por qué las hembras de muchas especies viven más tiempo que los machos.

FUENTE: Revista Human Reproduction